viernes, 22 de octubre de 2010

Conversación con Dios (II)

-¡Mátame Dios!

-No puedo. Tú me mataste primero, me contestó.

-Debe haber alguna forma...

-De hecho, la hay: estás muerta.

-Entonces, ¡devuélveme a la vida!

-Por ahí debiste haber comenzado...

DULCE OLVERA

No hay comentarios.: