Existencia postrera

Si no imaginara, ella no existiría

si no recordara, ella no existiría

si no soñara, ella no existiría.

Mi ella cada vez es más mi aquella

y saber que existe ya no me basta:

necesito descifrar qué hacer ante mi destino;

su ausencia.

Es imprescindible para mis brazos

/ que imploran abrazar(la)

dejar de ignorar qué hacer ante su presencia añorada:

rogar a las piernas correr hacia ella

no es suficiente.

/ Mi destino, su ausencia. Mi destino, su ausencia.

Nuestro hado,

esperar eternamente por ese abrazo.

Por esos tres segundos para susurrar

lo evidente

/ pero necesario para los oídos.

DULCE OLVERA

"Cuando uno necesita, se siente vivo". M.Benedetti