Cinco meses pensando en ti; casi medio año. Parece que, pese a dominar la distancia, en cada día se ha ido tejiendo, poco a poco, y aún en proceso, un vínculo que nos está uniendo. A la vez, durante este tiempo, nos hemos descubierto (y aceptado), de forma mutua, algunas de nuestras peculiaridades. No somos perfectas -para qué-, pero disfrutamos estar juntas. A tu lado, he descubierto, puedo caminar sin pensar en la distancia o el rumbo; simplemente caminar. A tu lado, en otras palabras, el espacio cobra relevancia solo en donde tú estás. Porque cuando estás, esto es, a mi lado, o atrás, tapándome los ojos o jugando con mi cabello, y no solo en mis recuerdos (y ya también en sueños), yo estoy; estoy en totalidad para valorar cada momento contigo; estoy en totalidad para mirarte, escucharte, sorprenderme y agradecerte por convertirte en mi persona especial.
Y entonces la vida, mi vida, es aún más bella.
DULCE OLVERA
No hay comentarios.:
Publicar un comentario